Se trata de una planta baja luminosa y acogedora, diseñada para maximizar el confort y el disfrute en cada detalle. Su gran protagonista es, sin duda, la amplia terraza privada que se abre como un auténtico oasis personal. Este espacio exterior se convierte en el escenario ideal para transformar la rutina diaria: desde desayunos tranquilos con la luz suave de la mañana, hasta comidas al aire libre bajo el sol mediterráneo, tardes relajadas con amigos o simplemente momentos de calma para desconectar y respirar profundo.

La distribución interior del piso es perfecta, equilibrada y práctica, pensada para adaptarse a diferentes estilos de vida. Al entrar, un recibidor elegantemente delimitado crea una división natural entre la zona de día y la zona de noche, ofreciendo privacidad y comodidad. El salón, amplio y luminoso, conecta directamente con la terraza, inundándose de luz natural que aporta una sensación constante de paz y bienestar. La cocina, independiente y funcional, con salida directa al exterior, invita a vivirla como un espacio de creatividad y convivencia, ideal para quienes disfrutan cocinar y compartir momentos especiales en familia.

La zona de descanso está compuesta por una habitación principal en suite que garantiza máxima intimidad y confort, acompañada de tres habitaciones adicionales versátiles que se adaptan perfectamente a diferentes necesidades: desde un espacio para trabajar desde casa, una habitación para invitados o un cuarto de juegos para los más pequeños. Todo el conjunto está diseñado con una armonía que se siente en cada rincón, logrando un ambiente cálido y equilibrado.

El entorno de la finca complementa a la perfección esta vivienda excepcional. Se trata de un edificio moderno y bien cuidado, que ofrece zonas comunes pensadas para el disfrute de toda la familia: un jardín comunitario donde la naturaleza se hace presente, una gran piscina para refrescarse y relajarse durante los meses más cálidos, amplias zonas de paseo y vigilancia 24 horas que aportan seguridad y tranquilidad. Un lugar donde los niños pueden jugar libres y felices, mientras los adultos encuentran su espacio para desconectar y vivir sin prisas.

Vivir aquí es mucho más que habitar un piso: es elegir un estilo de vida privilegiado. La proximidad a la playa, el acceso directo al parque de la Ciutadella y la cercanía a espacios naturales y a todos los servicios hacen que esta ubicación sea insuperable. Al mismo tiempo, se disfruta de la calma y el sosiego de un barrio residencial diseñado para el bienestar y la calidad de vida.

Este piso no es solo una oportunidad inmobiliaria, sino ese espacio donde puedes imaginar tu vida desplegándose día a día, sin renunciar a nada, donde cada detalle está pensado para que te sientas en casa desde el primer momento.